Esperar a ver

El día del partido en que enfrentábamos al Cúcuta por la Copa Colombia saludé a un compañero de trabajo, seguidor de Millonarios desde hace ya muchos años, y ya como se ha vuelto costumbre entre hinchas la mirada fue un poco triste, desdichada, desahuciada, esa mirada de lunes cuando Millos viene de perder el fin de semana, la de arrugar la boca, subir las cejas y decirse sin hablar “¿y ahora que?”. Venía pensando en la situación del equipo, en que escribir, que hacer y entre ese pésame mutuo me dijo: “esperar a ver si nos dan la sorpresa”.

Esperar a ver si nos dan la sorpresa”, esa fue la frase, casi le digo que ya que vamos a esperar si en lo que va del torneo no han hecho nada y hoy estamos casi al borde de jugar la promoción, que esos manes no le ponen amor ni al día de la madre, pero no, lo pensé dos veces y decidí no decirle nada más para acabar de bajar su moral y terminar de golpear a ese hincha de corazón, le dije si, esperar a ver que, aunque no creo mucho que nos sorprendan. Y es que este equipo es tan predecible, tan malito que uno ya no sabe, bueno, deje así.

Pero cooooomo!, sí, contra todos los pronósticos nos dieron la sorpresa, le ganaron de visita (en el suspiro del partido) al Cúcuta y le ganaron (bien) al América en Bogotá, el jueves pasado un empate en Tunja (por el juego aplazado) y finalmente ayer un triunfo un poco apretado frente al colero Cortuluá. Pero mi opinión no ha cambiado gran cosa y es que no creo responsable acomodarme luego de estos triunfos en que de todas formas Millonarios no ha variado mucho, no ha pasado de ser un equipo mediocre, con ganas pero que da la impresión que le falta algo, ese algo que debido a su ausencia nos tiene donde nos tiene; pero bueno, de todas formas hoy la cosa es diferente, se respiró un poquito, eso no se puede negar y ese aire viene bien, era ya necesario, ahora a seguir por esa senda. De todas formas aun falta torneo pero se ha perdido mucho y hay que ganar casi todo, ahí si como dijo mi compañero, “esperar a ver si nos dan la sorpresa”.

Creo que ese amigo mío resume a muchos por no decir todos los hinchas azules, fiel hasta el final, que no le ha importado todo lo que han hecho con el club y sigue ahí, alentándolo, apoyándolo siempre, que se aguanta las cada vez más comunes batidas de sus amigos hinchas rivales, en fin, el que después de verlo caer y mantenerse en el fondo solo espera que le dé la sorpresa y gane.

Comentarios

Entradas populares